Es un poco raro, porque el hotel se ve muy reciente, pero en mi habitación, la alfombra había visto mejores días, y tenía un olor desagradable, que incluso no me dejó dormir muy bien. El baño, por otra parte, estaba inmaculado. El personal es muy amable. Olvidé unas camisas nuevas en la habitación, y el hotel las envió a casa de un amigo en Nagoya; un servicio que va mas allá de lo que es su deber.